Introducción

      La Fisioterapia se define como el “Arte y Ciencia del Tratamiento Físico, es decir, el conjunto de técnicas que mediante la aplicación de agentes físicos curan, previenen, recuperan y readaptan a los pacientes susceptibles de recibir tratamiento físico”.

     El fisioterapeuta dispone del uso de numerosos agentes físicos (masaje, agua, sonido, electricidad, movimiento, luz, calor, frío...) en las modalidades de electroterapia, ultrasonoterapia, hidroterapia, mecanoterapia, termoterapia, magnetoterapia o laserterapia, entre otras, pero sin descuidar o abandonar los métodos de Terapia Manual (principal herramienta del fisioterapeuta) para la prevención, tratamiento, curación y recuperación de un gran número de patologías y lesiones.

Indicaciones terapéuticas

Obstetricia y ginecología: Reeducación pre y post parto, incontinencia urinaria, etc.
Pediatría: Parálisis Cerebral Infantil, Atención Temprana, etc.
Vascular: Fisioterapia en amputados, drenajes linfáticos y venosos, etc.
Neurología: Ciática, Hernias de disco, Hemiplejías, Esclerosis múltiple, Parkinson, Parálisis Nerviosas, TCE, Lesión medular, etc.
Gerontología: pérdida de movilidad y funcionalidad del paciente anciano.
Neumología: EPOC, Fibrosis quística, etc.
Traumatología y Ortopedia: Esguinces, fracturas, luxaciones, roturas musculares, lesiones deportivas, desviaciones de la columna, recuperación postoperatoria.
Reumatología: Artrosis, Artritis, Fibromialgia, Osteoporosis, Espondiloartritis, etc.
Cardiología: Reeducación al Esfuerzo de pacientes cardiópatas.
• Rehabilitación.
Fisioestética: Celulitis, cicatrices adheridas, arrugas profundas...

Logo

Diseño:Skizze; Webmaster:Malbam.es

Aviso legal.    Política de privacidad.

Esta web utiliza cookies, puedes ver nuestra política de cookies aquí.
Si continuas navegando estás aceptándola.